El estiramiento facial o ritidectomía es un procedimiento quirúrgico que mejora las señales visibles del envejecimiento en la parte inferior de la cara y el cuello por medio de la resección quirúrgica del exceso de piel y grasa y el posterior estiramiento de la piel y reposicionamiento de los músculos laxos de la cara.
Este procedimiento mejora el contorno de la mandíbula y las mejillas y ablanda las marcas producidas por la sonrisa que van desde los bordes de la nariz hasta las comisuras de la boca.
Este procedimiento se hace de forma personalizada estudiando las facciones de cada paciente y los resultados deseados. Este procedimiento puede realizarse solo o con otros procedimientos como por ejemplo, levantamiento del ceño, cirugía de párpados o nariz o incluso liposucción de papada.
La cirugía de estiramiento facial es una opción para aquellas personas que quisieran eliminar aquellas señales de envejecimiento tales como:
Hundimientos en la cara
Pliegues profundos por debajo de los párpados inferiores
Marcas de la sonrisa que van desde la nariz hasta la boca
Caída de las mejillas debido a perdida del tono de los músculos en la parte inferior de la cara
Exceso de piel y/o tejido graso por debajo de la mandíbula y barbilla y cuello
Los mejores candidatos para este procedimiento son aquellos que tengan cualquiera de estas señales de envejecimiento pero a que aún tienen elasticidad de la piel y una estructura ósea bien definida. Esto normalmente incluye personas desde los 40 hasta los 70 años que se encuentran en adecuado estado físico y emocional.
Este procedimiento inicia con una incisión a lo largo de la línea del cabello en la sien y hacia abajo siguiendo la línea de la oreja.
Se separa la piel del sistema músculo-aponeurotico superficial (SMAS), tejido adiposo y los músculos por debajo. El tejido caído se tonifica y reposiciona; luego se tensa la piel y se corta el exceso de la misma para producir una apariencia más firme y juvenil.
Como parte del procedimiento se realiza una técnica llamada lipofilling, que involucra tomar tejido graso de otras áreas del cuerpo e inyectarlo en las áreas deseadas de la cara. Así es como se consigue una mejoría dramática de los pliegues nasolabiales y las líneas de marionette. Se colocan dos pequeños drenajes y un apósito especial alrededor de la cara para reducir el riesgo de un hematoma. Además se administran antibióticos endovenosos para reducir el riesgo de una infección.
Luego del procedimiento usted tendrá que pasar una noche en nuestra clínica bajo la supervisión de una enfermera dedicada exclusivamente a su cuido. Se aplicará crioterapia local para reducir aún más la formación de hematomas o moretes. A la mañana siguiente, el Dr. Urzola le visitará para cambiar el vendaje y de ser posible retirar los drenajes colocados el día anterior. En ese momento se determina si se puede darle la salida hacia el centro de retiro y recuperación.
Los puntos de sutura normalmente se retiran a los cinco días de la cirugía. Se le recomienda fuertemente que descanse y repose lo más que pueda durante la siguiente semana y que evite realizar cualquier actividad que requiera un esfuerzo físico vigoroso por al menos 15 días. Usted podrá sentir la piel de la cara adormecida y tensa por alrededor de 6 semanas luego del procedimiento, pero normalmente luego de la 4 semana usted se sentirá y se verá genial.
Dolor: es tolerable y generalmente cede con analgésicos. Normalmente se presenta solo en los primeros 4 a 6 días.
Inflamación facial y en cuello: disminuye gradualmente, desapareciendo
alrededor de la tercera semana.
Pequeñas áreas de equimosis (moretones).
Estreñimiento: es un efecto secundario de la disminución de la actividad,
el uso de analgésicos y la deshidratación.
Náuseas.
Es habitual que sientas la piel de la cara algo «acolchada», el Dr. Urzola colocará un vendaje especial alrededor de tu cara, esto hará que sientas que es dificil escuchar, y que está muy apretado; sin embargo no debes tocarlo.
Drenaje